Sunday, September 17, 2006

Esta vez, Mariana jugaba en el salón con Karina, la Cocker Spaniard de 7 meses que su mamá le regaló, aunque ahora se arrepentía. Maríana podía notarlo en los bruscos cambios de temperamento de su madre cada vez que Karina se acercarba a lamerle los piés. Se detuvo, tomó la perra en sus brazos, oyó voces en la habitación. Su mamá hablaba con Ofelia, una de sus mejores amigas, y Mariana no pudo evitar acercarse a la puerta y oir la conversación.
Mamá: Mariana no sería Mariana, Sería Andrés Mauricio
Ofelia: Mariana es una niña hermosa, y muy tierna, como ninguna otra niña.
Mamá: Si, es muy dulce, era la niña de los ojos de Mauricio.
Ofelia: El siempre quiso que fuera niña, recuerdo cuando estabas embarazada. Y tu no querías, decias que era un niño y le compraste todo azul.
Mamá: Siempre quise un varón. Ahora amo a Mariana, pero si hubiese sido niño estaría más tranquila.
Ofelia: Pero no entiendo porqué dices eso?
Mamá: Las mujeres sufrimos más en la vida...No quiero que Mariana sufra, pero se que sufrirá, si hubiera sido Andrés Mauricio.......

Mariana no entendia..Qué había de malo en ser niña? si las niñas eran mejor que los niños? Será por eso que le gustaba ponerse botas de goma y comer tierra en el jardín infantil? Porqué iba a sufrir más que Andrés Mauricio? Ella no quería sufrir, su príncipe no la haría sufrir, bailarían el vals por siempre junto al estanque, vivirían juntos toda la vida en la inmensa torta de fresas y gelatina..
Porqué decía eso su madre? Sufrir?
Por primera vez, sintió miedo, no el miedo de pensar que bajo su cama había un fantasma con cara de anciano y sombrero de duende...era un miedo distinto...por primera vez se mordió los labios, por primera vez deseó no crecer.

2 comments:

Món said...

Algún día Mariana se dará cuenta de lo hermoso que resulta ser mujer, de lo maravilloso que es tener la posibilidad llevar en su vientre a otro ser humano; Mariana aprenderá que nada en la vida es fácil y que ser mujer tampoco, pero seguro, estoy segura, será feliz, porque ese miedo que sintió entoces habrá de convertirse en fuerza y corazón para dar la cara a la vida, atreverse, enamorarse y, si es necesario, volver a empezar.

Te quiero parecera y también a Mariana, dale un abrazo fuerte de mi parte.

Anonymous said...

dicen que en Nunca Jamás los niños no crecen nunca, no sufren y los sueños se cumplen con sólo creer en las hadas...

la realidad es diferente... se nace, se crece, se sufre... pero también se ríe, se lucha y se consiguen las cosas. lo importante es mantener intactos los sueños...

un beso linda